Que nadie busque en el callejero de Valencia la Plaza de la Constitución, porque no la encontrará. El último vestigio que queda es una placa situada en la fachada de la Iglesia de Santa María del Mar recayente a la Avenida del Puerto. Antiguamente la iglesia no estaba alineada con la avenida sino que delante de ella había una manzana de edificios con los cuales formaba la plaza. Esta recibió su nombre como celebración por la primera Constitución promulgada en 1812.
La placa actual es de finales S. XIX y sustituye a la original, destruida a raíz de unos incidentes acaecidos durante la visita del rey Fernando VII al Grao de Valencia.