Al principio de la calle del Rosario existe un amplio edificio construido en ladrillo caravista. Se trata de un molino de arroz de principios del S. XX que fue rehabilitado para albergar dos museos.
Uno de ellos está dedicado a la Semana Santa Marinera y exhibe vestidos de distintas hermandades, estandartes e imágenes procesionales entre otros objetos.
El otro museo está dedicado al Arroz, y gracias a la recuperación de la maquinaria original del molino, hoy en día podemos contemplar de manera interactiva el proceso de elaboración de este alimento fundamental de nuestra cultura gastronómica.