Esta semana nos ha deparado un feliz hallazgo arqueológico, que viene a demostrar que en nuestra ciudad todavía es posible descubrir lugares ocultos e insólitos.
Durante las obras de restauración de la antigua fábrica de Bombas Gens – notable ejemplo de patrimonio industrial del cual ya os hemos hablado en otra ocasión- ha aparecido fortuitamente una bodega subterránea de finales del S. XV o principios del XVI. El espacio, prácticamente intacto, conserva elementos como tinajas o un lagar, y podría pertenecer a una alquería huertana del antiguo poblado de Marxalenes.
Existe la intención de que la bodega sea visitable, integrada en el futuro complejo sociocultural que la Fundación Per Amor l’Art – actual propietaria del edificio- abrirá al público dentro de unos meses.