Recientemente ha tenido lugar un extraño fenómeno en la playa del Perellonet. Han emergido de la arena casi un centenar de pirámides de hormigón de dos metros de altura, que jalonan la primera línea de playa.
No se trata un vestigio de civilizaciones remotas, ni de un modo de comunirse con seres de otros planetas. En realidad forman parte de la escollera que se construyó en los años 60 para proteger el litoral del oleaje y que con el paso de los años habían quedado sepultadas bajo la arena. Pero ahora, los fuertes temporales de las últimas semanas las han sacado de nuevo a la superficie, creando una estampa de irreal belleza.